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Contexto internacional (Marco de Sendai)

El Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030 fue aprobado en la Tercera Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre la Reducción del Riesgo de Desastres, celebrada del 14 al 18 de marzo de 2015 en Sendai (Miyagi, Japón), que brindó a los países una oportunidad única de: a) Aprobar un marco para la reducción del riesgo de desastres después de 2015 conciso, específico, preparado con visión de futuro y orientado a la acción;   b) Concluir la evaluación y el examen de la aplicación del Marco de Acción de Hyogo para 2005-2015: Aumento de la Resiliencia de las Naciones y las Comunidades ante los Desastres1; c) Examinar la experiencia adquirida mediante las estrategias, instituciones y planes regionales y nacionales para la reducción del riesgo de desastres y sus recomendaciones, así como los acuerdos regionales pertinentes para la aplicación del Marco de Acción de Hyogo; d) Determinar las modalidades de cooperación basada en los compromisos para la aplicación de un marco para la reducción del riesgo de desastres después de 2015; e) Determinar las modalidades para el examen periódico de la aplicación de un marco para la reducción del riesgo de desastres después de 2015.

Durante la Conferencia Mundial, los Estados también reiteraron su compromiso de abordar la reducción del riesgo de desastres y el aumento de la resiliencia ante los desastres con un renovado sentido de urgencia en el contexto del desarrollo sostenible y la erradicación de la pobreza, y de integrar como corresponda tanto la reducción del riesgo de desastres como el aumento de la resiliencia en las políticas, los planes, los programas y los presupuestos a todos los niveles y de examinar ambas cuestiones en los marcos pertinentes.   

En este sentido la conferencia fue una valiosa oportunidad para el intercambio de experiencias entre los diferentes actores relacionados con los desastres de origen natural y uno de sus principales agentes  gatillantes, “el Cambio Climático” y antrópicos (producidos por el hombre), lo que permitió una revisión del Marco de Acción de Hyogo que guio el accionar de los países en esta materia entre el decenio de 2005- 22015 y para definir por cierto con algunas dificultades para su consenso un nuevo marco para el periodo 2015 -2030.

Con el propósito global de lograr una reducción considerable de la perdida de vidas, medios de vida entre otras afectaciones producidas por causa de desastres naturales, el marco de Sendai establece 4 prioridades

  • Comprender el riesgo
  • Fortalecer la gobernanza para la gestión del riesgo
  • Invertir en la reducción del riesgo de desastres para la resiliencia
  • Aumentar la preparación para una respuesta eficaz ante desastres y reconstruir mejor

Para esto se han definido 7 metas mundiales

1.- Reducir sustancialmente la mortalidad mundial de desastres 2030 uno de los objetivos del milenio

2.- Reducir sustancialmente el número de personas afectadas en todo el mundo para el año 2030.

3.- Reducir las pérdidas económicas directa de desastres en relación con el PIB mundial 2030

4.- Reducir sustancialmente los daños del desastre a la infraestructura crítica y la interrupción de los servicios básicos entre ellos los servicios de Salud y educación en particular mediante el desarrollo de su capacidad de recuperación para el año 2030

5.- Aumentar sustancialmente el número de países con estrategias nacionales de RRD al año 2020

6.- Mejorar sustancialmente la cooperación internacional a los países en desarrollo mediante el apoyo adecuado y sostenible para completar sus acciones nacionales para la aplicación de este marco para el año 2030

7.- Aumentar sustancialmente la disponibilidad y el acceso a múltiples sistemas de alerta temprana e información del riesgo de desastres y evaluaciones a las personas al año 2030

En relación con la importancia de esta conferencia y del marco de acuerdos de Sendai, la delegación chilena extrajo algunas de las siguientes conclusiones;

La importancia de los gobiernos locales en el proceso de prevención y preparación ante las amenazas es crucial, por el profundo conocimiento de las fortalezas y debilidades de sus respectivas comunidades, escenario donde se gestan los riesgos, se manifiestan las amenazas y construye las condiciones para el desarrollo local sostenible. Esto implica la imperiosa necesidad de fortalecer su capacidad de gestión preparación y respuesta ante las vulnerabilidades que afectan a sus comunas.

Las escuelas y comunidades educativas tienen un rol importantísimo en la resiliencia de sus territorios. Es desde ellas y con ellas una excelente vía para llevar a cabo un trabajo solo en el ámbito de la prevención sino también en la rehabilitación y reconstrucción en este ámbito es importante avanzar en los procedimientos de utilización de las escuelas como albergues ya que es importante cuidar que la respuesta a un desastre no atente contra el derecho a la educación de niños, niñas y jóvenes.

Debe haber un gran énfasis esfuerzo para educar y preparar a la ´población existe gran cantidad de material desarrollado por distintas organizaciones y en distintos países que debe ser utilizado y/o adoptado a cada realidad local. Es este mismo sentido, es necesario incrementar diferentes esfuerzos sociales y económicos para apoyar las practicas ancestrales y tradicionales, compartir y difundir el conocimiento y prácticas en este ámbito, fortalecer organizaciones sociales y educacionales su relación con los gobiernos locales y de estas entre si,

Es importante incorporar la perspectiva de genero en todas las políticas y prácticas promoviendo el liderazgo de las mujeres e involucrando a los jóvenes niños, y niñas, personas con discapacidad pueblos indígenas en la definición y aplicación de estas políticas

La relevancia de la colaboración del sector privado en materias de reducción de riesgo de desastres promoviendo su integración en iniciativas conjuntas e integrales para explorar posibilidades de desarrollo en conjunto con empresarios locales en los distintos niveles territoriales en el marco de la responsabilidad social empresarial.